La traducción de Ciudades en evolución fue mi primera traducción publicada del inglés al castellano y, como toda opera prima, creo que es la más lograda. Me acerqué a Geddes de la mano de Eduardo Menéndez y, posteriormente de María Arce, que me reforzó el interés por la obra del maestro de Mumford. Creo que la introducción a Ciudades en evolución refleja el interés que me generó el personaje y su obra, aunque quizá posee un tono demasiado entusiasta en el que no se ponen de relieve sus limitaciones, que al verlas replicadas en Mumford me han parecido más importantes: (1) el carácter refractario, cuando no decididamente adverso, al marxismo y a la dialéctica; (2) ante la deficitaria comprensión de la relación entre tecnología y capital, la primera aparece como una fuerza autónoma, como motor de la historia, aunque ex negativo; (3) la falta de implicación en la lucha de clases y en el “ecologismo de los pobres” que lo reivindica genera, aun sin pretenderlo, la figura de un intelectual tradicional (pienso en Gramsci, situado en las antípodas de esta figura). La influencia de Mumford en los antidesarrollistas, y de estos en el conjunto de los movimientos “antisistémicos”, es hoy en día tan grande que sería preciso elaborar más estas opiniones críticas.
Patrick Geddes (1854-1932) fue un polifacético biólogo y urbanista de origen escocés. Figura poco conocida, su influencia en el ámbito del análisis urbano es, sin embargo, fundamental. A él se debe la primera formulación del concepto de “conurbación”y la insistencia en el diagnóstico antes de la planificación. Muchas de sus ideas han entrado en el cuerpo de la ecología urbana a través de su discípulo Lewis Mumford, quien reconocía que Geddes había establecido el armazón principal de su propio pensamiento. La intuición de la profunda relación entre teoría y práctica que debe guiar al urbanismo llevó a este autor a huir de la carrera académica y a orientar su vida y su trabajo a los viajes, las exposiciones urbanas, los informes urbanísticos (en Inglaterra, Escocia, India, Palestina) y decenas de proyectos (viviendas obreras de bajo coste, editoriales, periódicos, museos destinados a ilustrar la evolución de las ciudades) de escaso éxito económico pero profundo significado. Geddes es hoy ya una referencia clásica, inexcusable para comprender la ciudad del presente y planificar la del mañana.
(Contraportada del libro)